TAMBORITO Y ESPINA: LAS APARIENCIAS ENGAÑAN


Tamborito repasa su traje regional frente al espejo, rollizo, con sus pequeños ojos de mirada profunda, satisfecho de cómo lucirá con el grupo folclórico donde canta. Se ajusta el pañuelo rojo al cuello, se recoloca el chaleco, se mira por delante y por detrás su pantalón bombacho. Entona un suspiro al tiempo que reajusta la faltriquera bajo la faja. Mira y remira que a sus calzas blancas no se le hayan soltado ningún punto. Por último, se acopla el sombrero sobre el pañuelo de bandolero serrano.
 

Sale de la casa hacia el garaje del enorme patio. Tamborito elige hoy el todoterreno...

¿Continuará...?

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